Cuando se reclama un marco regulatorio estable y predecible como requisito imprescindible para la realización de inversiones y el consiguiente crecimiento económico de un país, se está pensando en la buena regulación, en un Estado de Derecho en el que los límites de actuación de las Administraciones Públicas y los operadores económicos estén fijados de antemano.
Pérez-Llorca utiliza cookies propias y de terceros, ubicados en países cuya legislación no garantiza un nivel adecuado de protección de datos, para elaborar estadísticas sobre el uso de este servicio. Puedes aceptar o rechazar el uso de las cookies pinchando en los botones de la parte inferior de este banner y obtener más información sobre el uso de cookies y sus derechos en nuestra política de cookies.