In recent years, it has become common for banks to transfer outstanding receivables or bad credits – whether already secured with mortgages or not – in order to, among other reasons, remove these assets from their balance sheet along with the risks associated with them.
Pérez-Llorca utiliza cookies propias y de terceros, ubicados en países cuya legislación no garantiza un nivel adecuado de protección de datos, para elaborar estadísticas sobre el uso de este servicio. Puedes aceptar o rechazar el uso de las cookies pinchando en los botones de la parte inferior de este banner y obtener más información sobre el uso de cookies y sus derechos en nuestra política de cookies.